La semana pasada tuvo lugar un debate de control político en la Comisión V de la Cámara de Representantes, en la que exponentes de distintos sectores de la industria láctea discutieron situaciones como la práctica de adicionar lactosueros a la leche y venderla como un producto puro.
Uno de los congresistas presentes, César Eugenio Martínez Restrepo, dijo durante el debate que “es criminal” vender leche que no sea este producto, haciéndolo pasar como lactosuero. “Darle leche a un niño simulando que es leche, es criminal. Nosotros tenemos una materia prima que es la leche y que es sustancial para el desarrollo cerebral de los niños”.
En la discusión se recordó también la importancia de la ganadería en el país, en cuanto a que esta actividad representa 12% del PIB agropecuario y es responsable de aproximadamente 20% de los empleos del sector y genera cerca de 736.000 puestos de trabajo.
Sin embargo, se recordó también que el consumo per cápita de leche en Colombia no es muy alto, pues se estima que, en promedio, una persona consume 152 litros al año. Esto, sumado a los problemas de productividad que aquejan a la industria nacional y la regulación de precios, hace que el sector no pase por su mejor momento.
“Desde 2019 apoyamos a más de 300.000 campesinos en el proceso de demandar a nueve empresas colombianas por la vente de leche adulterada como leche pura. Es nuestro compromiso mejorar las condiciones de productividad de los campesinos y, paralelamente, lograr que las autoridades respectivas les brinden el seguimiento adecuado a estas irregularidades”, dijo Roberto Ramírez director de Demogan. Leer más